Hacía meses que no contestaba a sus intentos de contacto, y se había acostumbrado a escribirle cartas. Al principio hablaban de ellos, de lo que habían sido, de lo que sentía... pero poco a poco se habían transformado en una simple necesidad de comunicación, en una forma de sacar fuera lo que antes compartían de viva voz y que sin él se quedaba enquistado en la garganta impidiéndole hablar. Si hiciera público este nuevo entretenimiento muchos la tildarían de excéntrica, de absurda, de loca que envía pensamientos escritos en papel en la era del...