Me gustan los gajos de mandarina muy dulces... apretados, casi casi sin zumo.
Soy un desastre para los pijamas, pasado el día del estreno acabo siempre mezclando cada una de sus partes con otros viejos pero más cómodos. De hecho, para la ropa, soy un desastre en general, la mayor parte de los días llevo calcetines desparejados, me engaño pensando que es un acto de rebeldía pero en realidad es el resultado de lavarlos a destiempo y malguardarlos en un cajón que tengo a reventar.
Como buena castellana, presumo de soportar el frío madrileño estoicamente...
martes, 30 de octubre de 2012
sábado, 15 de septiembre de 2012
Vera (con V de visión)
Cuando era pequeña, siempre quise que me pusieran gafas. Me ponía las de mi madre en cuanto tenía ocasión, unas gafas enormes, ochenteras, muy a la moda, con las que me veía preciosa ante cualquier espejo. Cada vez que una compañera de clase venía protestando y con esa fundita de multiópticas yo me acercaba a su pupitre y le preguntaba si me dejaba ponérmelas, y en las revisiones médicas siempre fallaba adrede alguno de los símbolos de la última fila a ver si había suerte... pero no, nací con "exceso de visión".
Nacer con exceso de visión...
viernes, 6 de enero de 2012
Sin esperar respuesta.
Hacía meses que no contestaba a sus intentos de contacto, y se había acostumbrado a escribirle cartas. Al principio hablaban de ellos, de lo que habían sido, de lo que sentía... pero poco a poco se habían transformado en una simple necesidad de comunicación, en una forma de sacar fuera lo que antes compartían de viva voz y que sin él se quedaba enquistado en la garganta impidiéndole hablar. Si hiciera público este nuevo entretenimiento muchos la tildarían de excéntrica, de absurda, de loca que envía pensamientos escritos en papel en la era del...
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